Memorándum 2792, un golpe contra los derechos conquistados.

(Tomado de declaraciones del dirigente sindical Orlando Chirinos).

…..´´En las relaciones laborales de los últimos 30 años un gobierno no había producido un instrumento jurídico tan reaccionario y antiobrero como el memorándum 2792, que surge como parte de los lineamientos para ser implementados en las negociaciones de las contrataciones colectivas, en el marco del Programa de Recuperación, Crecimiento y Prosperidad Económica….. . Es una profunda reforma laboral antiobrera y reaccionaria, ….……

Las relaciones laborales las desarrollan son las partes, que serían las empresas con sus abogados y los trabajadores con sus organizaciones sindicales. El rol del Estado    …(en este caso…)  como institución burguesa es mantener la relación capital-trabajo a través de la conciliación y la solución de los conflictos entre esas clases sociales con intereses antagónicos. Pero, a partir del memorándum 2792 con la excusa de la defensa de las fuentes de trabajo y la distribución equitativa de los salarios, el Estado se convierte en parte, mediante la creación de la llamada mesa técnica dirigida y designada unilateralmente por el Ministerio del Trabajo, que es una instancia organizada para, en este contexto de crisis económica, evitar que haya conflictos laborales…

 

     …..El memorándum 2792 implica varias agresiones a conquistas del movimiento obrero venezolano como la eliminación del derecho a huelga; la afectación del concepto general de salario; la violación al principio de progresividad y la negación del derecho a la negociación colectiva de las contrataciones laborales …..¨ (hasta aca tomado de declaraciones del dirigente sindical Orlando Chirinos).

 

    Esto es parte de los instrumentos que el gobierno utiliza, para imponernos una política económica, que desarrolla  en medio de una crisis nacional e internacional, con medidas que van en beneficio de los intereses de los explotadores. Esto está acompañado de la entrega de nuestras riquezas a través de las llamadas zonas E, en donde los inversionistas tendrán derecho a no pagar impuestos, y a imponer condiciones paupérrimas a la mano de obra, es decir, la maquila estaría a la orden del día. Para todos esos planes de entrega, el gobierno, necesita un movimiento obrero desmovilizado, sin direcciones clasistas, sin unidad, y es allí en donde la política de criminalización de nuestras luchas juega un papel importante.

El gobierno, esta sin miramientos hacia sus antiguos cooperadores sindicales, y hasta a algunos de ellos les ha llegado el guantazo, sobre todo en las industrias básicas del país, casos emblemáticos como el de Rodney Alvarez, EudisGirot, amén de las desapariciones forzosas como la de Carlos Lanz, Alcedo Mora, se multiplican, en donde los trabajadores son puestos presos como muestra de lo que el gobierno estaría dispuesto a propinarnos si superamos la desmovilización que hoy existe, alimentada por la burocracia sindical atada a los intereses del gobierno que le concede prebendas y cuotas de cierto poder.

 La crisis económica capitalista no tiene fondo, en algunas de sus últimas intervenciones, el gobierno promete sacarnos de ella, direccionando grandes cantidades de dinero hacia el agro y otras esferas, alejadas del petróleo y sus derivados. La experiencia que conocemos nos dice, que los inversionistas no están pensando en el pueblo, están pensando como llenar sus arcas aun más, con reales del estado. Los revolucionarios proponemos que todo plan económico, toda inversión, tiene que ser presentada a las bases organizadas, para que sean discutidas, aprueben o rechacen las mismos, y el control de los trabajadores de todo lo que se produce es básico para contrarrestar la voracidad de los explotadores.

Los revolucionarios rechazamos todo ataque a los derechos conquistados por los trabajadores, y llamamos a reorganizar nuestras fuerzas, para responder al plan macabro que solo trae desempleo, criminalización de nuestras justas luchas obreras y populares, desmejoras en todas nuestras condiciones de vida y trabajo.

Tenemos que reorganizar, unificar, desarrollar nuestras capacidades de movilización con banderas reivindicativas y políticas, en donde están, entre otras, No a la entrega de Zonas Especiales, No al memorándum 2792, no a la criminalización de nuestras justas luchas obreras y populares, discusión y cumplimiento de todo contrato  colectivo, Libertad para los trabajadores presos por actividades sindicales, nacionalización de la banca y el comercio exterior bajo control obrero,  por la construcción de un gobierno obrero y popular, que nos guíe hacia el socialismo, por un partido   de los trabajadores con una dirección clasista, revolucionaria y combativa.

 

CSR - El Topo Obrero